El Schalke ganó 1-0 al APOEL por insistencia ya que desde el inicio del partido mereció ir ganando y no solo por un gol. El conjunto chipriota aguanto hasta última hora, pero finalmente la victoria terminó llegando por su propio peso.
Dominio total del Schalke que ha controlado el partido de principio a fin, creando ocasiones para haber goleado, pero como esto es fútbol y las matemáticas no cuentan, estuvo a punto de no pasar del empate.
El Schalke empezó acosando al APOEL teniendo ocasiones desde el primer minuto donde Matip, Choupo-Moting o Goretzka intentaron sin éxito abrir el marcador. Waterman, el portero del APOEL, estuvo sensacional parando todo lo que le llegaba y muchas de las paradas con dificultad.
El conjunto chipriota también tuvo alguna oportunidad de marcar al filo del primer tiempo, pero los remates de Charalambidis y Soteriou no encontraron portería por lo que al descanso se llegó con el resultado inicial.
Tras la reanudación, el Schalke siguió a lo suyo aunque ya no de la misma manera que en el primer tiempo. Waterman seguía apareciendo en cada jugada de gol del conjunto alemán que tendrá pesadillas con el portero del APOEL que una tras otra sacaba el balón que llevaba destino portería.
En el tramo final de partido, Vander pudo haber adelantado al equipo visitante, pero no estuvo acertado ante el portero y desaprovechó una gran oportunidad, a diferencia de Choupo-Moting a cinco minutos del final que batía por bajo a Waterman para hacer el 1-0.
Con el partido a punto de finalizar, Aogo pudo ampliar la ventaja del Schalke gracias a un penalti, pero el portero del APOEL no estaba por la labor de conceder más de un gol y consiguió detener la pena máxima. A pesar de la buena actuación, el Schalke se llevó los tres puntos que le colocan líder con 11 puntos, seguido del Sparta Praga con nueve. Cerrando el grupo se queda el APOEL con tres puntos, y un puesto más arriba el Asteras que tiene cuatro.
Dominio total del Schalke que ha controlado el partido de principio a fin, creando ocasiones para haber goleado, pero como esto es fútbol y las matemáticas no cuentan, estuvo a punto de no pasar del empate.
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Fuente: Getty Images |
El Schalke empezó acosando al APOEL teniendo ocasiones desde el primer minuto donde Matip, Choupo-Moting o Goretzka intentaron sin éxito abrir el marcador. Waterman, el portero del APOEL, estuvo sensacional parando todo lo que le llegaba y muchas de las paradas con dificultad.
El conjunto chipriota también tuvo alguna oportunidad de marcar al filo del primer tiempo, pero los remates de Charalambidis y Soteriou no encontraron portería por lo que al descanso se llegó con el resultado inicial.
Tras la reanudación, el Schalke siguió a lo suyo aunque ya no de la misma manera que en el primer tiempo. Waterman seguía apareciendo en cada jugada de gol del conjunto alemán que tendrá pesadillas con el portero del APOEL que una tras otra sacaba el balón que llevaba destino portería.
En el tramo final de partido, Vander pudo haber adelantado al equipo visitante, pero no estuvo acertado ante el portero y desaprovechó una gran oportunidad, a diferencia de Choupo-Moting a cinco minutos del final que batía por bajo a Waterman para hacer el 1-0.
Con el partido a punto de finalizar, Aogo pudo ampliar la ventaja del Schalke gracias a un penalti, pero el portero del APOEL no estaba por la labor de conceder más de un gol y consiguió detener la pena máxima. A pesar de la buena actuación, el Schalke se llevó los tres puntos que le colocan líder con 11 puntos, seguido del Sparta Praga con nueve. Cerrando el grupo se queda el APOEL con tres puntos, y un puesto más arriba el Asteras que tiene cuatro.
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